Alcohólico y harto de vivir a la sombra de Daniel, su antiguo rival, Johnny toca fondo y decide reabrir el dojo de karate Cobra Kai.

Daniel ve el nuevo dojo Cobra Kai, y eso le trae recuerdos dolorosos. Más tarde, se entera de que Kyler, el chico que le gusta a Sam, fue atacado por un karateca.

Con la idea de vigilar a Sam, Daniel se ofrece como chaperón para el baile de Halloween. Johnny intenta conseguir más alumnos para su flamante proyecto.

Alguien arruina uno de los carteles de Daniel. La madre de Miguel le prohíbe practicar karate a su hijo, y Johnny recibe una llamada preocupante de la escuela de Robby.

Una nueva alumna se suma a Cobra Kai. Entretanto, Daniel piensa en la forma de vengarse de Johnny. Kyler traiciona a Sam, y Miguel la defiende en la escuela.

Tras la pelea de Miguel, se inscriben más alumnos en Cobra Kai, pero Johnny no los recibe de la mejor manera. Para herir a su padre, Robby empieza a trabajar con Daniel.

Johnny debe persuadir al comité del torneo de levantar la prohibición impuesta a Cobra Kai, pero Daniel es uno de los miembros. Miguel y Sam tienen una cita.

Mientras Johnny prepara a sus alumnos para el torneo de All Valley, Daniel empieza a entrenar a Robby en el Miyagi-do sin saber que es el hijo de Johnny.

Una discusión hace que Johnny y Daniel revivan el pasado. Los alumnos de Cobra Kai planean vengarse de los chicos populares.

Antes del torneo, Johnny les enseña a sus alumnos la tercera regla de Cobra Kai: sin piedad. Alguien inesperado regresa a la vida de Johnny.